Evelyn Muñoz forma parte de Isaval en Cuba desde hace 11 años. Comenzó en el área administrativa, pero su pasión por el mundo comercial la llevó a convertirse en una pieza clave del equipo en La Habana.

Hoy queremos conocer su historia, su experiencia en el sector y cómo Isaval se ha convertido en sinónimo de calidad en Cuba.

 

 

Cuéntanos sobre ti: ¿quién eres, qué haces en Isaval y cuánto tiempo llevas en la empresa?

Mi nombre es Evelyn Muñoz, trabajo en Cuba en la sucursal de Isaval que está en La Habana. Llevo trabajando en Isaval 11 años, justo en febrero hice 11 años. Primero inicié con la parte administrativa como contable y, bueno, luego pasé a la parte comercial que es lo que estoy haciendo ahora en estos momentos.

 

¿Cómo conociste Isaval y qué te motivó a unirte al equipo?

Bueno, fue en un momento en el que yo había terminado mi servicio social, que en Cuba, luego que te gradúas de la universidad, tienes que estar un tiempo trabajando en un servicio social. Lo había terminado, había terminado también una maestría en la que estaba involucrada y, bueno, decidí que era el momento adecuado de hacer algún cambio.

Yo no quería seguir donde estaba y quería algo diferente, así que envié el currículum a varias empresas que conocía, porque trabajaba en el Ministerio de la Construcción en Cuba, en la dirección de negocios donde teníamos mucho intercambio con empresas extranjeras que hacían negocios con Cuba, organizábamos las ferias de la construcción y, entonces, tenía contacto con varias empresas.

Les mandé por mail mi currículum y una de las que me llamó fue Isaval. Allí me entrevisté con José Carlos y con Luis Mario, que estaba por la parte de Cuba. Lo que más me llamó la atención realmente fue el equipo. Desde el primer momento que llegué noté la calidez, todo fluyó muy bien. Aquello no parecía una entrevista, parecía una conversación.

Era todo súper agradable y fue una cosa que no sentí en ninguna de las otras entrevistas a las que fui, en las que todo era así un poco más frío, las preguntas… Y, pues nada, tuve la suerte de que me llamaron. En este caso era para el puesto en el área administrativa, estaban buscando para la parte de contabilidad y administración una persona. Me seleccionaron y comencé a trabajar allí hasta el día de hoy.

 

¿Cuál es tu papel específico dentro del Departamento Comercial de Isaval en Cuba?

Bueno, allá en Cuba somos varios comerciales y, entonces, un poco nos dividimos por clientes y vamos atendiendo varios clientes dentro de todo el país. Entonces lo que intentamos es, primero, fidelizar a los clientes que ya tenemos desde años, intentar darles el mejor servicio.

Contamos, por suerte, con el respaldo de unos productos con muchísima calidad y con el respaldo de fábrica, que siempre nos apoya en todo y eso nos facilita mucho el trabajo. Intentamos fidelizar a los que ya tenemos y, luego, buscar nuevos clientes por donde diversificar nuestra cartera y hacer nuevas operaciones. Y ese, más o menos, es nuestro día a día.

 

Después de todos estos 10 años tienes una gran experiencia en el sector. ¿Qué balance haces de tu trayectoria en Isaval?

Yo soy graduada en Ciencias Empresariales. Con lo cual, cuando empecé en Isaval, empecé en el área de Administrativa y Económica y eso era un territorio que tenía muy conocido y era muy familiar.

Pero luego, cuando empecé a familiarizarme con los productos y las cosas se te van pegando, aunque no las toques, o sea, aunque no sea tu trabajo día a día. Empecé a conocer los productos y tal, y me fue muy ameno. Luego, cuando pasé al área comercial, uno de los mayores retos fue enfrentarme a obras. Cuando vas a vender productos o a defender tus productos, tienes que ir a obras de construcción en las que, normalmente, tratas con arquitectos, ingenieros…

Yo, siendo de la parte empresarial, pensaba que eso me iba a suponer algún problema. Que iba, de cierta forma, a estar en desventaja, pero lo cual nunca ha sido así, porque teniendo una buena preparación en el ámbito del producto, o sea, conociendo lo que tú estás vendiendo y el servicio que les vas a prestar… Pensé que eso me iba a presentar más problemas, pero realmente no. Y, bueno, era uno de los retos que tuve, que era una rama en la que no tenía mucho conocimiento, o sea, mucho conocimiento de base académico, pero que sin problemas.

 

¿Cuál es la opinión en Cuba de Isaval y sus productos ¿Qué factores consideras clave para el éxito de la empresa en este mercado?

Realmente en Cuba la marca Isaval es muy apreciada. Muy apreciada y muy conocida. Isaval lleva en Cuba ya muchos años.

La marca se ha popularizado no solamente por la presencia que ha tenido en los puntos de venta, sino por la calidad. En Cuba Isaval está asociado a calidad. Las personas cuando van a una tienda a buscar una pintura y tienen varias opciones, a veces, Isaval no es la opción más económica y hay otras pinturas más económicas, pero seleccionan Isaval porque saben que están asegurando que luego van a tener una pintura de calidad y que les va a ser duradera.

Yo creo que eso es uno de los aspectos más importantes que nosotros tenemos. Podemos estar confiados en que el producto que vendemos es un producto que no nos va a dar problemas, que no nos va a defraudar. Cuando hay algún tipo de problema siempre vamos seguros y a defenderlo, porque sabemos que es el adecuado y que tenemos respaldo siempre de la calidad del producto.

En Cuba realmente se aprecia mucho. Isaval es sinónimo de calidad en Cuba, pero conocido, incluso, yo diría que más que aquí en España.

 

¿Cuáles son los productos o líneas de productos más populares de Isaval en Cuba y por qué crees que han tenido tanto éxito?

Pues en Cuba realmente las pinturas acrílicas, o sea, lo que genera más volumen es la venta de pinturas acrílicas, como el Mate Supra o el M10. El Revisal se vendió muchísimo con un cliente que teníamos muy importante. También los esmaltes al agua se comercializan bastante.

El esmalte industrial, que al inicio empezamos comercializando mucho,  ahora ya se ha ido suplantando por el esmalte al agua.

 

¿Por qué crees que ha tenido tanto éxito Isaval en Cuba?

Pues yo te diría que volvemos casi que a la misma pregunta y muy ligada con la última que me has preguntado. Isaval, el éxito que ha tenido en Cuba, es uno por tener un producto de calidad y dos por las personas.

Tanto desde aquí desde fábrica como el equipo que tenemos en Cuba es un equipo que da la cara, es muy afable, son dinámicos, resuelve cualquier problema, intenta solventar cualquier problema y, eso, el cliente lo aprecia mucho.

 

¿Qué es lo que más valoras de trabajar en Isaval y qué es lo que más te gusta de tu trabajo?

Pues lo que más valoro de Isaval son las personas. Son las personas y es el motivo por el que empecé en Isaval, por el que desde el día uno me gustó y que se ha mantenido en estos diez años.

Incluso con las personas nuevas que se han ido incorporando la filosofía de la empresa va en todos y se va pasando de unos a otros y la calidez que tienes en Isaval con las personas es única. Creo que eso es lo que más aprecio.

 

Para finalizar, ¿cómo definirías a Isaval desde un punto de vista más personal?

Bueno, para mí, Isaval, yo lo definiría como una gran familia. Es una familia que ha ido creciendo, o por lo menos en este tiempo que he estado formando parte de la familia la he visto crecer, y he visto que se traslada la filosofía a cada nueva persona que se va incorporando.

Creo que eso es muy importante y sobre todo es un plus que tiene Isaval.