Lola Melchor

Técnico Comercial.

Nuestra compañera Lola cumplió, a finales de 2014, 25 años en la empresa y por ello, hemos querido conmemorarlos conociéndola un poquito más a fondo.

  • ¿Cómo fueron tus inicios en la empresa?

Fueron años muy gratificantes, los recuerdo con mucho cariño ya que entré en Pinturas Isaval siendo muy jovencita, hace ya 25 años. El Sr. Isaac Vallejo, uno de los fundadores, fue el encargado de realizarme la entrevista del que sería mi primer y único trabajo (aunque he desempeñado diferentes funciones en la empresa). Empecé trabajando de recepcionista, puesto que me ayudó a formarme también como persona.

 

  • ¿Cuándo asumes las funciones de Técnico Comercial?

Se acercaba la jubilación de Ricardo Mora y alguien tenía que cubrir su puesto y hacerse cargo de su cartera de clientes. Fue entonces cuando Santiago Vallejo me planteó la opción de asumir esas funciones. La respuesta fue casi inmediata, me hizo muchísima ilusión que confiaran en mí para cubrir ese puesto. Fue una decisión “rompedora”, muy valiente por parte de la compañía ya que en el mercado no hay ninguna empresa de la competencia que cuente con una mujer entre su red de ventas.

 

  • Durante estos años, la empresa crecido y evolucionado notablemente, ¿cómo has vivido los cambios? 

Todos los cambios son duros, pero con paciencia y mucho tesón una se acaba acostumbrando. Yo soy muy positiva y pienso que cada cambio acontecido ha sido en beneficio de la empresa y al final es lo que  a los empleados que la formamos nos interesa.

 

  • ¿Cómo valoras el trato con el cliente?

Para mí el cliente es lo más importante y mi objetivo es conseguir en todo momento el 100% de su satisfacción. Intento ser lo más rápida posible en darles respuestas y sobre todo, y pienso que es algo que me caracteriza, los trato siempre de forma muy cercana y amable. Mis clientes son “mis niñ@s” y así es como les llamo directamente.

En este trabajo la habilidad principal es el trato y las relaciones con las personas.

 

  • ¿Cómo es un día a día en la jornada laboral de un Técnico Comercial de Pinturas Isaval?

Imagino que cada compañero tiene una rutina diferente. En mi caso, tengo unas rutas establecidas semanalmente. Siempre intento compaginarlas con las rutas que se establecen desde el departamento de expediciones.

Conforme realizo las visitas paso in situ, los pedidos con el fin de dinamizar esa venta y que desde el departamento de logística puedan preparar el pedido lo antes posible.

A su vez, durante el día, entre visita y visita voy abriendo el correo y realizo también labores administrativas.

También visitamos nuevos o potenciales clientes, prescribimos obras, visitamos ejecuciones de aplicación,… Y al terminar la jornada, hacemos los reportes de todas las tareas que hemos realizado durante el día.

 

  • ¿Compartirías con nosotros alguna anécdota divertida de estos años?

Se acercaba la fecha de “Todos los Santos” y había quedado con un cliente para cobrar un recibo. ¿Adivináis donde fui a cobrarlo? Si, así es, el cliente había ido a realizar la visita de rigor de sus familiares al cementerio como cada año, y allí estaba, esperándome con el dinero. Más que divertida es una anécdota curiosa.